Y llegamos al final de la saga de la condena.
A pesar de no ser nada épica en comparación con otros momentos de Berserk, esta saga finaliza con un punto que marca un antes y un después en este manga. Ha tenido que llegar este tomo para que se forme un grupo más o menos nutrido de personajes que acompañen al protagonista a partir de ahora, algo que seguro que hará que Guts cambie en cuanto a su forma de ser o de actuar con el resto del mundo.
Y la poca epicidad de esta saga quizá esté en que por primera vez creo que Miura ha desaprovechado a un enemigo. Mozgus podría haber dado mucho más de sí que ser un lagarto que ataque con el golpe de Luffy. Podría haber sido un verdadero mastodonte, y sus secuaces verdaderas pulgas que hubieran puesto en peligro de forma más violenta la integridad del grupo. Pero no ha sido así y todo se ha quedado en un medio eclipse que se ha merendado a innumerables humanos y ha puesto en juego otra vez a los Kushanos.
Y Griffith ya está en el mundo tangible de los humanos.
Lo mejor: El grupo.
Lo malo: Nada en especial.
1 comentarios:
LOL ¿Pero te parece poco lo mucho que le ha tocado los cojones a Guts el bueno de Mozgus? A mí incluso me ha parecido cansino de más. Que joder, no es un verdadero apóstol siquiera. No pidas que sea un Zodd xD
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